Love me like is 1990
Crecí con una idea sobre el amor que ya no existe.
En 1997 descubrí las boybands y me volví ultra fan de los Backstreet Boys y *Nsync, porque vamos ¿quién no amaba ver a 5 chicos super guapos cantándole al amor de su vida que por favor le hiciera caso? ¿a caso existía alguna mujer en este planeta en aquel 1997 que no le hiciera caso a Nick Carter o a Justin Timberlake? ¿de verdad?; Yo recuerdo tener a penas 7 u 8 años y recuerdo tener sus posters a lo ancho de la pared de mi cuarto contestándoles a sus canciones que aquí estaba dispuesta a amarlos (As long as you love me - BSB).
Crecí viendo películas como "10 things I hate about you", "a walk to remember" y "She is all that", esta última marcó mi infancia y adolescencia (a pesar de no ser mi favorita) pero lo fue en aquel tiempo porque me identificaba mucho con la protagonista; yo siempre fui la ñoña del salón que se la pasaba dibujando y la cual aspiraba a algún día tener por novio al guapito de la escuela... y de ahí si salió mi canción favorita por toda la vida, "Kiss Me - Sixpence Non The Richer".
Crecí recibiendo y escribiendo cartas en hojas de libreta, decorada con plumas de colores, algunas con brillitos, incluso en hojas decoradas con animalitos y personajes kawaii (antes de saber que eran kawaii), enviando dibujos como el acto más noble y sincero de representar un "lo hice pensando en ti", dejando aquellas cartas en la mochila, en la libreta o si teníamos la fortuna de vivir cerca... en el buzón de nuestro "crush".
Crecí con una imagen de que tener un novio es como tener un mejor amigo con quien juegas, te diviertes, haces tontería y media, sonríen juntos, salen a cenar, a ferias, a parques, al cine y en medio de todo eso, no pueden dejar de decirse lo mucho que se aman, lo mucho que disfrutan estar juntos, tomados de la mano y robarse un par de besos cada que sonríen juntos, decirse lo mucho que se gustan y la mayor parte de las veces, no hacen falta las palabras, solo un cruce de miradas, solo eso es suficiente para saber que la otra persona se derrite por ti y que a ti te hace perder los pies de este planeta.
Crecí escuchando canciones que lo decían todo cuando las palabras hacían falta, dedicándolas a la persona que más te gustaba para que supiera que esa canción te hacía pensar en ella, poniéndole pausa al cassette o al CD para intentar copiar la letra, de nuevo, en una hoja de libreta o a veces en hojas de colores (Según el nivel de cursi que tuvieras en ese momento) para luego dejarla en su mesa banco en la escuela a manera de carta... oh si, la letra de una canción en una carta, no había nada más romántico, porque luego a la hora del descanso o esa tarde en el parque, dónde habían quedado en verse, te la cantaría o la estaría tarareando... eso, eso es lo mas maravilloso del mundo, porque significa que la escuchó, que le prestó atención y que, de ahora en adelante, con esa canción iba a recordarte todo el tiempo.

Qué maravilloso era el amor de los 90's, cuando no existía el celular y tenías que armarte de valor para llamar a su casa y tristemente estuviera ocupado, para luego intentarlo de nuevo una hora más tarde ¿y qué crees? ¡contestara alguno de sus padres!, de verdad que ¡qué nervios!, aún puedo sentir las mariposas en el estómago y los nervios de ese momento, todo para preguntarle si estaba ocupado/a y que si querían ir al parque y verse o ir a casa de (inserte nombre de cualquier amigo cómplice de ese amor) a jugar algún videojuego, o si querías salir a patinar o a hacer carreras con las bicicletas, parar en la tienda de helados y compartir su helado favorito.
Correr, jugar, disfrutar, saltar, sonreír... sonreír todo el tiempo, tomarse de la mano, cruzar miradas inocentes llenas de emociones positivas, sonrojarse, correr bajo la lluvia, bailar a media calle o en el super, ser feliz... ser inmensa e infinitamente feliz con algo tan simple, tan básico, tan inocente y sobre todo, tan puro.
Ámame como si fuera 1990 de nuevo,
Ámame como solíamos hacerlo cuando teníamos 13 o 15 años,
Como cuando tomamos a alguien de la mano por primera vez,
cuando nos mandábamos cartas,
cuando quedábamos de vernos en algún lugar a equis hora,
cuando la emoción y adrenalina de ir a ver a tu crush a su casa lo era todo,
cuando no existía whatsapp ni facebook,
cuando lo único que teníamos era teléfono fijo y a veces MSN,
Ámame como la primera vez que nos vimos,
como cuando nuestras miradas dijeron por primera vez todo lo que sentíamos,
como cuando dimos nuestro primer beso
y como cuando nos dimos el primer beso tu y yo.
Viajemos en el tiempo y vamos a amarnos como en 1990
¿me acompañas?
En 1997 descubrí las boybands y me volví ultra fan de los Backstreet Boys y *Nsync, porque vamos ¿quién no amaba ver a 5 chicos super guapos cantándole al amor de su vida que por favor le hiciera caso? ¿a caso existía alguna mujer en este planeta en aquel 1997 que no le hiciera caso a Nick Carter o a Justin Timberlake? ¿de verdad?; Yo recuerdo tener a penas 7 u 8 años y recuerdo tener sus posters a lo ancho de la pared de mi cuarto contestándoles a sus canciones que aquí estaba dispuesta a amarlos (As long as you love me - BSB).

Crecí recibiendo y escribiendo cartas en hojas de libreta, decorada con plumas de colores, algunas con brillitos, incluso en hojas decoradas con animalitos y personajes kawaii (antes de saber que eran kawaii), enviando dibujos como el acto más noble y sincero de representar un "lo hice pensando en ti", dejando aquellas cartas en la mochila, en la libreta o si teníamos la fortuna de vivir cerca... en el buzón de nuestro "crush".
Crecí con una imagen de que tener un novio es como tener un mejor amigo con quien juegas, te diviertes, haces tontería y media, sonríen juntos, salen a cenar, a ferias, a parques, al cine y en medio de todo eso, no pueden dejar de decirse lo mucho que se aman, lo mucho que disfrutan estar juntos, tomados de la mano y robarse un par de besos cada que sonríen juntos, decirse lo mucho que se gustan y la mayor parte de las veces, no hacen falta las palabras, solo un cruce de miradas, solo eso es suficiente para saber que la otra persona se derrite por ti y que a ti te hace perder los pies de este planeta.
Crecí escuchando canciones que lo decían todo cuando las palabras hacían falta, dedicándolas a la persona que más te gustaba para que supiera que esa canción te hacía pensar en ella, poniéndole pausa al cassette o al CD para intentar copiar la letra, de nuevo, en una hoja de libreta o a veces en hojas de colores (Según el nivel de cursi que tuvieras en ese momento) para luego dejarla en su mesa banco en la escuela a manera de carta... oh si, la letra de una canción en una carta, no había nada más romántico, porque luego a la hora del descanso o esa tarde en el parque, dónde habían quedado en verse, te la cantaría o la estaría tarareando... eso, eso es lo mas maravilloso del mundo, porque significa que la escuchó, que le prestó atención y que, de ahora en adelante, con esa canción iba a recordarte todo el tiempo.

Qué maravilloso era el amor de los 90's, cuando no existía el celular y tenías que armarte de valor para llamar a su casa y tristemente estuviera ocupado, para luego intentarlo de nuevo una hora más tarde ¿y qué crees? ¡contestara alguno de sus padres!, de verdad que ¡qué nervios!, aún puedo sentir las mariposas en el estómago y los nervios de ese momento, todo para preguntarle si estaba ocupado/a y que si querían ir al parque y verse o ir a casa de (inserte nombre de cualquier amigo cómplice de ese amor) a jugar algún videojuego, o si querías salir a patinar o a hacer carreras con las bicicletas, parar en la tienda de helados y compartir su helado favorito.
Correr, jugar, disfrutar, saltar, sonreír... sonreír todo el tiempo, tomarse de la mano, cruzar miradas inocentes llenas de emociones positivas, sonrojarse, correr bajo la lluvia, bailar a media calle o en el super, ser feliz... ser inmensa e infinitamente feliz con algo tan simple, tan básico, tan inocente y sobre todo, tan puro.
Ámame como si fuera 1990 de nuevo,
Ámame como solíamos hacerlo cuando teníamos 13 o 15 años,
Como cuando tomamos a alguien de la mano por primera vez,
cuando nos mandábamos cartas,
cuando quedábamos de vernos en algún lugar a equis hora,
cuando la emoción y adrenalina de ir a ver a tu crush a su casa lo era todo,
cuando no existía whatsapp ni facebook,
cuando lo único que teníamos era teléfono fijo y a veces MSN,
Ámame como la primera vez que nos vimos,
como cuando nuestras miradas dijeron por primera vez todo lo que sentíamos,
como cuando dimos nuestro primer beso
y como cuando nos dimos el primer beso tu y yo.
Viajemos en el tiempo y vamos a amarnos como en 1990
¿me acompañas?
-Ch.


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